Los sindicatos volverán a salir a la calle este domingo, día 18, para protestar por los recortes en los servicios públicos y contra la reforma laboral. La campaña 'creciente y sostenida' que anunciaron UGT y Comisiones Obreras (CCOO) tiene la adhesión en Menorca de otras fuerzas sindicales, como el Sindicat de Treballadors de l'Ensenyament (STEI-i), la Unión Federal de Policía (UFP) y la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), con representación en la sanidad pública. Sus responsables, junto a los secretarios generales de UGT, Servando Pereira, y de CCOO, Ramon Carreras, llamaron ayer a la participación masiva en la manifestación que saldrá a las 12 del mediodía de la Plaza Explanada de Maó porque, si la gente se queda en casa "será corresponsable de estas políticas y después vendrán más", aseguró el dirigente de Comisiones Obreras.
Los sindicatos mayoritarios esperan que en estos días se sumen todavía otras organizaciones en defensa de unos servicios públicos que, aseguran, están cada vez más debilitados en aras de la reducción del déficit. "Un debilitamiento interesado para justificar la privatización de partes del Estado del bienestar para dárselas al capital privado", aseguró Carreras.
Por su parte, el líder de UGT, Servando Pereira, rebautizó al PP como el partido "de la pobreza perpetua", una situación a la que, según los sindicatos, conducen las políticas de austeridad que afectan "a todo el mundo, no sólo a los trabajadores del sector público". Al mismo tiempo Pereira dudó de que el impuesto sobre el combustible se destine a la sanidad y se preguntó cómo se va a controlar y gestionar el dinero que recaude el Govern.
Desde los otros sindicatos, el secretario local de UFP, Xavier Gonyalons, criticó el recorte salarial del 7 al 9 por ciento aplicado a los policías, la falta de renovación del material o el descenso en el número de plazas convocadas para nuevos agentes que, a la larga, afirmó, afectará a la prevención de la delincuencia y la seguridad ciudadana. También los recortes sanitarios, recordaron desde el CSIF, afectan al personal administrativo y a los celadores, lo que influye ya en los retrasos de los traslados de enfermos a Palma. Por su parte, Francesc Cardona, responsable del STEI-i, denunció que la dotación económica a los centros de enseñanza ha caído un 30 por ciento este año y que en Menorca trabajan actualmente nueve personas "sin cobrar y sin contrato desde el mes de octubre, dentro del programa de lectoescritura".