Existen ya varias propuestas sobre la mesa para que Can Saura tenga un uso diferente al de museo y, sobre todo, para que el Ayuntamiento de Ciutadella no tenga que hacerse cargo del coste de su mantenimiento. Este periódico ha ido informando de las intenciones del alcalde José María de Sintas de vender o ceder el edificio a una empresa privada, o incluso de convertirlo en la sede judicial del municipio. Cualquiera de estas opciones, no obstante, está condicionada a un hecho, según De Sintas, y es que los industriales que han acometido las obras de reforma del edificio cobren lo que la administración aún les adeuda.
Así, el primer edil explica que "deberemos alcanzar un acuerdo con quien asuma la titularidad del edificio y liquidar la deuda con esas empresas". La situación, ahora mismo, está prácticamente bloqueada. El Govern balear apremia al Ayuntamiento de Ciutadella para que recepcione las obras, pero para poderlo hacer, los industriales deben otorgar el certificado definitivo de las instalaciones que han montado, y no quieren hacerlo si no cobran. El Consistorio aseguraba en su día que debía ser el Govern quien pagara la totalidad de la deuda, pero al final ambas administraciones parecen haber acordado que cada una de ellas abonaría la mitad de la deuda, aunque no se sabe cuándo ni tampoco cómo se abonará.
Con este panorama, De Sintas insiste en que su primera opción pasa por vender o ceder el edificio. En este sentido, la próxima semana se reunirá con unos inversores italianos interesados, presuntamente, en convertir Can Saura en un hotel. El alcalde apunta que, si tras este encuentro se confirma que el interés es cierto, se convocaría un concurso público para la venta o la cesión durante un tiempo del edificio, convocatoria que estaría abierta a todos los que puedan estar interesados en esta opción. "Cuanta más concurrencia, mejor puede ser la oferta", apunta De Sintas. De momento, no obstante, el tema está encallado por el sobrecoste de las obras y por las desavenencias entre las diferentes empresas que participaron en la obra, algunas de las cuales han llegado a los tribunales.