La nueva ordenanza reguladora de los horarios de los establecimientos de la oferta turística complementaria, de espectáculos públicos y actividades recreativas de Ciutadella no ha sido muy bien recibida por parte de los sectores afectados.
Las patronales CAEB y PIME manifestaron ayer su descontento con el texto que se aprobará esta noche, y que ha sido fruto de una "negociación política y sin tener en cuenta la opinión del sector". Tanto es así que, incluso, desde la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears tildan de "absurda" la ordenanza por considerar que "con la que está cayendo, solo nos faltaba reducir nuestros horarios de actividad".
En estos términos se expresaba ayer el presidente de la Asociación de Restauración de Menorca de CAEB, Francisco Carrasco, al conocer a través de los medios el alcance del texto que esta noche se aprobará con los votos de Partido Popular y Unió des Poble de Ciutadella de Menorca.
Carrasco reformuló la petición de que el Consell Insular elabore un texto consensuado y que sirva para todos los municipios, para que no existan diferencias de horarios entre pueblos. "Hay que consensuarlo entre todos, no solo entre los partidos políticos, porque parece que para ellos existen personas de primera y de segunda". Se refería a la distinción que hará Ciutadella entre establecimientos en función de su ubicación, ya sea en el centro, en el puerto, en Es Pla o en las urbanizaciones. "Todos somos iguales y todos tenemos vecinos, no sé por qué tiene que haber horarios distintos".
Mal momento
El representante de las empresas de restauración agrupadas en CAEB lamentó que "con la que está cayendo y con lo mal que lo está pasando la oferta complementaria, no nos faltaba otra cosa" que la aprobación de una ordenanza "tan restrictiva como nunca había sido, parece que nos remontamos años atrás", denunció. "Estamos en una isla turística y por suerte todavía tenemos este recurso, lo que no puede ser es que a las 1.30 horas tengamos que decir a la gente que se levante de las terrazas porque tenemos que cerrar.
¿Qué dirá la gente? No querrán volver a Menorca", avanzó preocupado Carrasco.
Desde CAEB no entienden el motivo por el cual se ha reducido de las 2 a las 1.30 horas el cierre de las terrazas. "Este año ha habido 500 personas menos trabajando en el sector de la restauración, y en lugar de favorecer la creación de puestos de trabajo van en contra y reducen horarios".
Otras preocupaciones
Carrasco califica de "absurda" la ordenanza, aún más cuando "lo que realmente hace daño en Es Pla es el botellón, pero con eso no se atreven. Hay coches con maleteros abiertos y montan bares ahí mismo, pero se preocupan de las terrazas que no empiezan a trabajar hasta la una de la madrugada y que tendrán que cerrar a las dos", critica.
En cualquier caso, desde CAEB lamentan también que desde el Ayuntamiento se haya obviado su opinión. "Como siempre, han actuado sin consensuar nada con los empresarios, solo se han puesto de acuerdo dos partidos", espetó.
Descontento generalizado
Desde PIME, el secretario de la Asociación Menorquina de Cafeterías, Bares y Restaurantes, Jordi Bosch, explicó ayer que "el Ayuntamiento nos ha enviado hoy la ordenanza, y ya la hemos enviado a nuestros asociados".
Sin haber tenido mucho tiempo para examinar el texto, Bosch expuso el sentir generalizado del sector. "La gente ve que van a pagar justos por pecadores, porque la ordenanza reduce los horarios de forma general y eso no gusta, pero esperaremos para presentar alegaciones cuando se publique en el BOIB", avanzó.
Desde la Pequeña y Mediana Empresa de Menorca lamentan que "hemos tenido conocimiento del texto a través de la prensa, a nosotros no se nos ha convocado, ha sido una negociación política, los empresarios solo han podido acudir a uno u otro partido para expresar sus preocupaciones".
Bosch considera que para el sector de la restauración no es buena la reducción de una o dos horas de trabajo. "Afectará, y no poco", advierte.
Además, el secretario de la asociación asegura que del borrador que se les hizo llegar en abril hasta el texto definitivo que se aprobará hoy "ha habido cambios importantes, se reducen los horarios y aparece la regulación de las terrazas cuando antes no estaba". Por todo ello, Bosch es de la opinión de que "si había un problema con dos, tres o cuatro establecimientos, lo que no es justo es que ahora paguen todos".
En cuanto a la Asociación de Bares y Discotecas de Es Pla, este colectivo también ha recibido con desagrado la nueva ordenanza. "En principio no son buenas noticias, no entendemos por qué nos han recortado media hora, por qué nos quitan los 'after' y por qué nos harán cerrar las terrazas a las 2 cuando ni han comenzado su actividad".
No obstante, desde la entidad prefieren esperar al periodo de alegaciones, ante la esperanza de que puedan producirse cambios que permitan la supervivencia de sus locales.