El Ayuntamiento de Maó prevé avanzar esta misma semana en la supresión de aparcamientos en algunas calles del centro urbano de la ciudad con un objetivo doble, cumplir con la legalidad y fomentar el uso de los parkings disuasorios.
Es en este sentido que el equipo de gobierno iniciará la eliminación de los aparcamientos de la calle Sant Roc, es decir, desde la Plaça Constitució hasta el "Pont". Se habilitarán dos plazas para la gente que vaya a Correos, se ampliará la zona para el estacionamiento de motos además de incluir una bolsa para bicicletas.
El Ayuntamiento suprime también los aparcamientos de la calle Sa Rovellada de Dalt, concentrados entre la calle Negres y Duc de Crillón.
Otra actuación tendrá lugar en la calle Anuncivay partiendo del hecho que los vehículos que estacionan en esta zona pueden hacerlo en los aparcamientos habilitados en la Plaza Miranda y antigua fábrica de Catisa.
Botella señala además que es una demanda continuada del colectivo de arquitectos. Según el primer teniente de alcalde, la eliminación de los aparcamientos de esta calle fue abordada durante la jornada de la movilidad europea partiendo del hecho de que "es un vial demasiado emblemático".
La calle Infanta también sufrirá cambios notables en la eliminación de los aparcamientos, una medida que se ha tomado por incumplir la normativa vigente. No obstante, Botella resalta que están pendientes de una reunión con la Asociación de Vecinos para establecer algunas medidas que reduzcan la velocidad excesiva. Se tantea la ubicación de parterres de forma intermitente y en zigzag. Finalmente, en materia de aparcamientos, serán también suprimidos los de las calles Concepció, Santa Cecília y Santa Rosa al incumplir la normativa.
El equipo de gobierno también ha decidido actuar en el tramo que discurre entre la Costa de La Clota y la Plaça Sant Francesc. En concreto, la medida que pretende abordar pasa por cambiar de lado la zona de estacionamiento, puesto que "no tiene sentido que haya una isleta con contenedores de basura sin un paso de peatones que permita su acceso".
El concejal de Servicios Generales, Salvador Botella, explica que "hay aparcamientos vacíos en las bolsas disuasorias, que es donde queremos que la gente estacione". Además, indica que el mahonés mantiene la filosofía de dejar el coche en frente de casa por lo que "debemos forzar que cambien esta forma de pensar" para conseguir que "el peatón conquiste la calle".