Cerrado por los recortes, abierto por la educación. Este mensaje colgaba ayer en camisas, jerseys, americanas de quienes decidieron adherirse a la iniciativa autonómica que promueve la Plataforma Crida y que en la Isla ha sido liderada por las Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de los centros educativos públicos junto con la Plataforma en Defensa de l'Escola Pública.
La sala polivalente del Instituto Cap de Llevant de Maó acogió a la comunidad educativa del área de Llevant mientras que el Instituto Biel Martí de Ferreries lo hizo para la zona de Ponent. Este "encierro" hasta las doce de la noche pretendía "sumar esfuerzos y compartir iniciativas que busquen un mismo objetivo, defender la educación pública y de calidad y rechazar las políticas de recortes que se están aplicando en la enseñanza", apuntaba ayer Verónica García, miembro de la Plataforma en Defensa de l'Escola Pública.
El formato elegido para la actividad se repitió en todo el Archipiélago. Así, en lo que se refiere al Instituto Biel Martí, la comunidad educativa se reunió a las cinco de la tarde y compartió una chocolatada además de abordar diversos temas que a día de hoy generan conflicto en el entorno familiar. Por su parte, en el 'Cap de Llevant' se congregaron, al comienzo de la actividad, medio centenar de personas, todas ellas dispuestas a levantar la voz en favor de una educación de todos y para todos. El acto incluyó desde la creación y grabación de anuncios publicitarios en favor de la enseñanza, hasta el visionado del documental "30 minuts" emitido en TV3 sobre esta misma materia. Después de compartir manteles, el grupo se puso al día compartiendo los efectos de los recortes además de comentar los anteproyectos que pretende aplicar el Govern.
Garcia comenta que los ejes vertebrales a abordar son las consecuencias del anteproyecto de ley de convivencia, el anteproyecto de la Ley Orgánica de la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), los recortes y la política lingüística. Los asistentes se adhirieron también a un manifiesto. Además, desde la Plataforma denuncian la misiva enviada "hoy mismo (por ayer)" por la Conselleria a todos los centros educativos, en la que hace responsable a la dirección del centro del seguimiento de la actividad, además de solicitar un informe del acto desarrollado así como incidencias y desperfectos ocasionados.
Por su parte, el delegado territorial de Educación, Julián Hernández, defendía ayer el derecho de protesta. No obstante, dudaba de que la actividad se hubiese anunciado a Inspección y Planificación de Centros. Según explica, el acto debe incluirse, por un lado, en la Programación General Anual. Señala, por otro lado, que lo normal es que el Claustro plantee un acto y lo consensue para luego informar al Consejo Escolar que es quien lo aprueba para remitirlo a Inspección y Planificación. "No hemos recibido ninguna comunicación, tan solo del Instituto Biel Martí que ayer avisó de que tenían Consejo Escolar". En este sentido, desde la Plataforma señalan que la Asociación de Padres y Madres sabían que debían informar al centro, "tal y como se hizo", en base al decreto que regula estos colectivos.