La delegada del Gobierno en Balears, Teresa Palmer, firmará mañana el nombramiento de Javier López-Cerón, actual comandante de la Base Naval de Maó, como nuevo director insular de la Administración del Estado. Sustituirá en el cargo a Antoni Juaneda, que presentó su dimisión el pasado 30 de octubre al ser imputado en el Caso Over. Es la primera vez que un militar ocupa este cargo de representación del Estado en la Isla.
Javier López-Cerón cumple con la condición básica para ocupar el puesto, que es ser funcionario de nivel A o B, es decir licenciado, graduado universitario o técnico superior.
Su nombramiento se decidió ayer por la mañana. Teresa Palmer lo comunicó personalmente a López-Cerón. También fue informado el presidente del Consell, Santiago Tadeo.
La condición militar del nuevo director insular hace que deba obtener una autorización del ministro de Defensa, Pedro Morenés, para poder ocupar el cargo. Este puesto es incompatible con una función militar en activo. Por tanto, ha de contar con una excedencia o comisión de servicios especiales. Este aspecto hace que no pueda asegurarse la fecha en que se incorporará a su nuevo puesto.
Desde el 30 de octubre, tal como contempla la legislación, la secretaria general de la Dirección Insular, Amparo Conejero, ejerce las funciones del director insular. Incluso está previsto que sea ella la que ofrezca el discurso del 6 de diciembre, día de la Constitución.
Las principales funciones del director insular son de coordinación de los servicios en materia de derechos ciudadanos, procesos electorales, protección civil, exranjería y asilo, además de los servicios policiales.