El PSOE instó ayer al equipo de gobierno del Consell a cumplir su compromiso recogido en el presupuesto de la administración insular para 2012 de aprobar el Plan Director Sectorial de Carreteras, así como a facilitar un debate público en el que se tengan en cuenta las voces que reclaman un replanteamiento de los proyectos de mejora de la carretera general en los tramos entre Maó y Alaior y Ferreries y Ciutadella.
"Después de la demanda expresada por los colectivos de arquitectos e ingenieros industriales, el Consell debería reconsiderar su decisión", indicaron los socialistas. En esta línea, el PSOE considera oportuno que los proyectos se rehagan en base a un Plan de Carreteras que atienda la amplia sensibilidad ciudadana en favor de unos enlaces que supongan un menor impacto sobre el territorio y se ajusten a la realidad socioeconómica de la Isla.
En este aspecto, los socialistas recordaron que el Plan Director de Carreteras que el anterior equipo de gobierno dejó pendiente de aprobación definitiva determinaba que las obras de mejora de la Me-1 se deben adecuar a las necesidades reales de movilidad que, tal y como subrayaron, están alejadas de los criterios utilizados por el actual Ejecutivo insular para intentar justificar las "macro-rotondas".
Economía
Respecto a la repercusión de los trabajos sobre la economía menorquina, los socialistas mostraron su preocupación, derivada de la opinión de los dos colegios profesionales, relativa a que las rotondas a doble nivel no pueden ser ejecutadas por las empresas de la Isla.
"En cambio, en caso de construir las rotondas en superficie, además de reducir el impacto sobre el territorio, las empresas menorquinas podrían jugar un papel mucho más destacado", aseguraron.
Asimismo, el PSOE calificó de "excesivo" el coste de las obras de los dos tramos proyectados, cerca de 10 millones cada uno. En este punto, confiaron en que este hecho no acabe afectando a la ejecución de los proyectos de otros tramos a la hora de mejorar la seguridad y la fluidez de la vía.
En este sentido, los socialistas manifestaron que a partir del ahorro que pueda suponer la aplicación de las propuestas recogidas en las enmiendas el Consell podría negociar con el Ministerio de Fomento para poder reprogramar estas actuaciones hacia otros ámbitos importantes, tales como la entrada de la carretera de Sant Climent, la entrada de Na Ferranda, el triángulo Maó- Sant Lluís-Es Castell o la conexión que une Es Mercadal y Es Migjorn Gran.