El inspector jefe del Cuerpo de la Policía Nacional en Maó, Fernando León Vivó, defendió ayer la construcción de la nueva Comisaría y, por otra parte, constató un leve descenso de la delincuencia en la Isla durante el último año. Lo hizo en el transcurso de la recepción oficial celebrada con motivo de la festividad de los Santos Ángeles Custodios, en la sede de la Dirección Insular del Estado.
El acto contó con la asistencia del director insular, Javier López-Cerón; el comisario provincial del Cuerpo Nacional de Policía, Cristóbal Villalonga; el presidente del Consell, Santiago Tadeo; el teniente de alcalde de Maó, Simón Gornés; la senadora Juana Francis Pons Vila; los alcaldes de Es Castell y Sant Lluís, Lluís Camps y Cristóbal Coll, respectivamente; y representantes de otros cuerpos de seguridad del Estado, entre otras personas.
El comisario Fernando León Vivó constató el descenso en un 0,9 por ciento de los actos delictivos en la Isla durante el último año y la necesidad de disponer de una nueva Comisaría en Maó, para poder trabajar con mayor eficiencia, aunque reconoció las dificultades por la crisis. «No quiero que caiga en el olvido el proyecto de construcción de la nueva Comisaría para poder ofrecer un servicio de mayor calidad y excelencia», subrayó. León también destacó la celebración de unas jornadas de seguridad y sobre el uso de las nuevas tecnologías, todo ello dirigido a la población escolar, además de unos contactos mantenidos con comerciantes para reforzar la seguridad de sus establecimientos.
El director del Estado, Javier López-Cerón, destacó el trabajo realizado por la Policía Nacional, funcionarios y personal laboral, además de la armonía existente con la Guardia Civil y las policías locales. Por su parte, el comisario provincial Cristóbal Villalonga subrayó la profesionalidad y el espíritu de sacrificio de los miembros de las fuerzas de seguridad del Estado y la colaboración entre comisarías.