El Ayuntamiento de Alaior gestionará el año próximo 11,09 millones de euros, lo que supone un incremento del 1,61 por ciento en los presupuestos municipales respecto a 2013.
La propuesta presentada ayer por la alcaldesa del municipio, Coia Sugrañes, y por la concejal de Hacienda, Juana Mari Pons, prevé un incremento sustancial, del 18 por ciento, en los ingresos por la participación en los tributos del Estado, lo que permitirá mitigar el descenso (del 71 por ciento) previsto en las llamadas transferencias de capital, las ayudas y subvenciones que recibirán del Govern y del Consell Insular.
Desde el equipo de gobierno se destacó el «descenso de la carga impositiva» que se aplicará el año próximo. En ese sentido, la alcaldesa hizo hincapié en que el tipo impositivo del IBI se ha bajado entorno al 10 por ciento y que «se han congelado el resto de tasas y precios públicos».
A pesar de esas medidas, el capítulo de ingresos por impuestos directos tan solo bajará un 0,18 por ciento. La concejal de Hacienda explicó en ese sentido que, en base a las liquidaciones periódicas de 2013, se ha observado un importante incremento de los ingresos por plusvalías, así como de las altas en el catastro, lo que ha llevado al equipo de gobierno a aplicarlo «con prudencia» en las cuentas de 2014.
Asimismo, Juana Mari Pons aclaró que a pesar de esa bajada del IBI del 10 por ciento, en los recibos y en el capítulo de ingresos municipales el descenso será en verdad del 4,5 por ciento por culpa del incremento de los valores catastrales.
Inversiones
En cuanto a los gastos previstos para el año próximo, destaca un descenso del 16,2 por ciento en las inversiones. En este sentido, Sugrañes, recordó que no han previsto ninguna aportación de otras administraciones, por lo que se ha incrementado la aportación municipal un 56 por ciento hasta los 470.000 euros.
El destino de las inversiones serán obras menores «que dinamizan la actividad de las pequeñas empresas», principalmente la rehabilitación del matadero, la adecuación de la calle Barrecs, la mejora del Camí de Sa Mola, la recuperación del Camí de Llumenes y diversas actuaciones de supresión de barreras arquitectónicas.
Siguiendo con los gastos previstos, en el capítulo de bienes y servicios destaca un descenso del 4,5 por ciento. A pesar de ese descenso, reveló Sugrañes, el consistorio ha incrementado un 82 por ciento (200.000 euros) la inversión en labores de mantenimiento.