El síndrome de Diógenes, un trastorno del comportamiento que, entre otros efectos, se suele traducir en la acumulación de grandes cantidades de basura y desperdicios domésticos, es un problema tratado a menudo en los medios desde el sensacionalismo. Huyendo de esa tendencia, el equipo formado por Macià Florit y Macià Coll ha trabajado durante cerca de tres años para abordar la enfermedad desde una perspectiva diferente, más humana. El resultado es el documental «Plyushkin contra Diògenes. Un viatge d'anada i tornada», que se estrena mañana, a las 20.30 horas, en el Espai Sant Josep de Ciutadella.
Los 30 minutos de metraje toman como base la historia de un hombre conocido en el municipio que sufría el síndrome, Miquel Mesquida, pero vista desde el prisma de su esposa Magdalena y su hijo Martí.
Documentación
Relatan los responsables del documental que, a través de entrevistas, han ahondado en investigar cómo pudo ser durante cerca de 40 años la convivencia familiar con la acumulación compulsiva de objetos encontrados en la calle. Pero también han profundizado en averiguar «cómo Martí, tras la muerte de su padre, decidió deshacerse de todo ese material de una forma meticulosa y respetuosa con el medio ambiente», explica Macià Coll.