Las obras de mejora del tramo Maó-Alaior de la carretera general arrancarán antes de Semana Santa. Es la última previsión que hace el Consell Insular después de haber hecho públicas las condiciones del contrato y el anuncio de licitación de las obras. Las empresas interesadas tienen de plazo hasta el 21 de enero para presentar sus ofertas.
El presupuesto de las obras se elevará finalmente, con IVA incluido, hasta los 9,9 millones de euros, aunque el conseller de Movilidad, Luis Alejandre, explicó ayer que la máxima institución espera que las empresas rebajen ese coste con sus ofertas. No obstante, Alejandre explicó que «hemos intentado equilibrar el peso de los criterios técnicos y económicos».
El objetivo, defendió, es «que no se resienta la calidad de la obra» dando excesiva importancia a la oferta económica para la ejecución de un proyecto que ha levantando mucha polémica. Así, el pliego de condiciones muestra como los criterios técnicos suponen un máximo de 46 puntos, con especial hincapié en las propuestas de actuaciones medioambientales (26 puntos), mientras que la propuesta económica tiene un peso de 50 puntos.
Alejandre explicó que espera que la mesa de contratación resuelva el nombre de la empresa que llevará a cabo los trabajos «en un mes» y que los trámites necesarios para iniciar las obras no deberían alargarse más allá del inicio de Semana Santa. El contrato con la empresa licitadora tendrá una vigencia de 16 meses.
El conseller también explicó que el proyecto del tramo entre Ciutadella y Ferreries está pendiente de la comisión balear de Medio Ambiente y que el inicio de las obras entre Alaior y Maó supondrá «abrir el melón» de la mejora de la general, que ya acumula más de tres años de retraso.
Por ese motivo este año el Ministerio de Fomento ha decidido dejar al Consell sin la anualidad de 2013 del convenio de carreteras hasta que no empiece a justificar el destino de los fondos.
Cabe recordar que el proyecto del primer tramo que se modificará se encuentra en los juzgados después de que el grupo ecologista GOB haya presentado un recurso Contencioso Administrativo. Por otra parte, el Consell adecuó el impacto visual del proyecto a las recomendaciones de Medio Ambiente.