Zanjas de doce centímetros de ancho por unos 30 de fondo. Así se hará el despliegue del 80 por ciento de la red de fibra óptica que en breve empezará a recorrer los municipios de la Isla. El sistema que utilizará la unión temporal de empresas adjudicataria del proyecto es «poco agresivo», según señalan desde el área de Servicios Generales e Innovación del Consell, en la práctica totalidad del despliegue.
La red discurrirá por unos 68 kilómetros de autopista que permitirán unir el sector público de la Isla a la era digital. En 56 de estos kilómetros totales se utilizará un método «simple» y de bajo impacto. El tendido restante se llevará a cabo mediante obra civil convencional. Cabe señalar que la UTE ha ampliado el despliegue de la red. La cifra mínima que el Consell proponía en el pliego de condiciones era de 45,4 kilómetros.
El proyecto ejecutivo elaborado por la UTE formada por M. Polo, Dimensión Data y VOPSA se encuentra en período de exposición pública después de que la comisión de gobierno del pasado 28 de agosto diera luz verde al plan presentado por la adjudicataria. La vicepresidenta del Consell, Pilar Pons, estima que el despliegue de la red empezará en octubre y cuenta con un plazo de ejecución de cinco meses y medio.