El Ayuntamiento de Ciutadella no renovará el año que viene la concesión a la polémica terraza de Ses Voltes que, según Joan Triay (UPCM) y el resto de la oposición, incumple la ordenanza de ocupación de la vía pública en vigor. Lo anunció anoche en pleno el alcalde Ramon Sampol, quien dijo estar «plenamente de acuerdo» con que hay que hacer cumplir las ordenanzas, aunque toda la oposición en bloque coincida en realzar su incumplimiento sistemático.
La palma, recalcaron los portavoces de PSOE, PSM y UPCM, se la lleva la reciente normativa que regula la ocupación de la vía pública y que, en opinión de Triay, es motivo suficiente para que la concejal de Gobernación, Juana Mari Pons, «dimita por incapaz». La edil popular se escudó en la falta de efectivos policiales -«la plantilla ha pasado de 70 a 49 agentes»- para justificar que se haya relajado la labor inspectora.
Políticos, o mejor, gente dedicada a la política como esta concejal, que ha obligado al alcalde a dar la cara y desautorizarla, son una plaga contra la seriedad, la eficacia y la democracia.