Noche de reconocimientos la que se vivió ayer en el teatro del Orfeón Mahonés, donde tuvo lugar la gala de entrega de los III Premios Onda Cero Menorca. Un acto en el que se reconoció la labor y la trayectoria de diez personajes o entidades de la vida social, económica, cultural y deportiva de Menorca.
La ceremonia fue grabada por BiniTV.
El periodista Javier Ruiz Taboada y la directora de Onda Cero Menorca, Diana Font, fueron los encargados de conducir una ceremonia que empezó con la actuación de dos alumnas de Alba Estudi de Dansa, y que dio paso a la entrega de las distinciones.
Ante un lleno patio de butacas y con la presencia de representantes de la sociedad y la política menorquina, fueron subiendo al escenario los premiados, empezando por el Club Marítimo de Mahón. Luego siguieron la Colla de Geganters de Maó, el ciclista Albert Torres, la doctora en Economía por la Universitat de les Illes Balears Carolina Beltrán, o la directora del grupo de teatro de Sant Miquel de Ciutadella Mari Genestar, quien fue distinguida por su labor educativa a través del teatro en familia que inició su padre Andreu Genestar. Precisamente, en su intervención, la directora de Sant Miquel se refirió a un proverbio africano. «Mucha gente pequeña de lugares pequeños, hace cosas pequeñas para transformar el mundo».
Llegados al ecuador de los premios el cantante Bep Marquès subió al escenario para amenizar la velada con dos temas «muy menorquines», «Jo tenia un pardalet» y «Sa balada d'en Lucas», actuación que dio paso al resto de homenajes. Así, se entregaron los premios al grupo Joana Pons i ses Guitarres por sus 25 años de trayectoria, a la asociación gastronómica Fra Rotger, a la Asociación de Esclerosis Múltiple de Menorca, a la Escola de Salud Pública y a la Cova d'en Xoroi al cumplir sus 50 años.
Además, durante la noche también se hizo un reconocimiento a la propia directora de Onda Cero Menorca por sus 30 años de carrera en la radio menorquina. Diana Font recibió el homenaje de sus compañeros con una placa conmemorativa, así como del público presente en el acto. Fue una «encerrona» que logró «lo difícil que es dejarme sin palabras».
A modo de anécdota y referente a la gran asistencia de público, Javier Ruíz Taboada se refirió a la ausencia en el acto «del pequeño Nicolás que está con Obama asesorándole por las operaciones en Irak», bromeó. El acto concluyó con los parlamentos de las autoridades.