El Ayuntamiento de Alaior tiene desde el pasado mes de mayo el informe de telecomunicaciones que ha motivado la anulación por vía judicial del Plan General de Ordenación Urbana. La alcaldesa, Misericordia Sugrañes, explicó ayer que cuando el Consistorio tuvo conocimiento de la inexistencia de este informe, en marzo de este año, solicitó «inmediatamente» al Ministerio de Ciencia y Tecnología el documento. La petición se hizo, en concreto, el 6 de marzo y la Dirección General de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información lo remitió el 9 de mayo.
La alcaldesa indica que «con la máxima celeridad posible» entregamos el documento al abogado del Consell que ha llevado el caso del Plan General de Alaior con el fin de «intentar minimizar las consecuencias de una tramitación que no se había hecho bien». La alcaldesa hace especial hincapié a la frase del juez que indica que «el documento se solicitó cuatro años después de aprobarse definitivamente la revisión y a la vista del recurso».
Asimismo, Sugrañes aseguraba este lunes estar «decepcionada» por cuanto está ocurriendo, a lo que suma «las declaraciones hechas públicas por el exalcalde socialista del municipio» quien defendía que fue el PP quien aprobó el punto del plan que ha motivado el recurso. En este sentido, puntualizó que el Ayuntamiento «ha intentado salvar aquello que no hizo el anterior equipo de gobierno».
Aseveró que aún no pueden avanzarse los pasos legales que se van a tomar puesto que los servicios jurídicos están estudiando «en qué situación nos deja la anulación del planeamiento y cuál debe ser la hoja de ruta a seguir».
Parece poco razonable que el culpable no sea el que disparó la pistola (provocó el error que ha causado la anulación, vease Sr. Morlà & friends), sino el médico que intenta curarlo y no puede (el intento de aportar el informe, cuando el Juzgado dice que se debería haber aportado en el momento de la aprobación). A todo esto, el Ayuntamiento de Alaior no es parte en estos recursos. La parte recurrida es el CIME que es quien hace la aprobación definitiva del PGOU. Es evidente que en estos comentarios se respira demasiado forofismo por las dos partes, cosas del anonimato supongo.