La temporada turística ha arrancado en Menorca con la cifra más baja de paro, 5.286 personas, de los últimos siete años. Desde 2008, cuando abril se cerró con apenas 3.425 parados, no se contabilizaba tan poco desempleo.
La Semana Santa no ha logrado aumentar la contratación ya que, de hecho, se han contabilizado 30 contratos menos en el sector servicios que hace un año, pero la leve reactivación de la creación de empleo en la industria y, sobre todo, en la construcción han contribuido a reducir el paro en 662 personas a lo largo del último mes, 711 (un 12 por ciento menos) si se compara con los datos del mes de abril del año pasado.
El paro baja en todos los sectores, en mayor medida en los servicios, que suman 398 desempleados menos. Pero son la industria (23%) y la construcción (35%) los que más aumentan respecto de doce meses atrás. Tan es así que el 44,7 por ciento de todo el paro que se ha reducido en abril procede de antiguos trabajadores de ambos sectores económicos.
El descenso del paro en Menorca es más acusado entre los hombres (20,5%) que entre las mujeres (4,2%), y se manifiesta en mayor medida entre los extranjeros no europeos de más de 25 años.
30 meses seguidos bajando
El Consell celebra la recuperación que se desprende de las cifras. «En Menorca -remarca la vicepresidenta Pilar Pons Faner- ya llevamos 30 meses ininterrumpidos de bajada del paro, lo que demuestra que las administraciones van por el buen camino, el de la colaboración con el sector privado».
Tras conocer que Balears había liderado las cifras de afiliación de la Seguridad Social en abril, el conseller de Economía y Competitividad del Govern, Joaquín García, también se congratuló de que el desempleo haya bajado un 26% en las Islas «respecto del peor año de la crisis» económica. «La economía -reseñó- sigue una senda de crecimiento, que irá a mejor y es muy difícil que cambie», hasta el punto que ve más que probable superar los 10.000 puestos de trabajo anunciados para este año.
Más empleo y más precario
El PSOE no ve tantos motivos para la alegría y, a través deFrancina Armengol, ayer destacó que «tan importante como crear empleo es que el trabajo sea digno y con derechos. Tener un contrato laboral ahora no es sinónimo de vida digna, sino que hay más precariedad y cuesta llegar a fin de mes».