1.134 menorquines en situación de desempleo subsisten en plena temporada turística sin percibir ningún tipo de prestación, subsidio o ayuda. Lo revelan las últimas cifras sobre beneficiarios de prestaciones facilitadas a este diario por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) referentes al día 31 de julio, en pleno verano, momento en que un total de 2.371 residentes estaban registrados como perceptores de alguna de las tipologías de transferencias por desempleo, cuando el número de parados en la Isla se elevaba hasta los 3.505.
La lista de desempleados sin ingresos económicos del Estado ha experimentado un descenso de 560 personas respecto al mismo momento del año 2014, una caída del 19 por ciento, principalmente propiciada por el descenso interanual del paro, que, no obstante, no esconde otra realidad: si hace un año los parados sin ayuda representaban un 28,8 por ciento del total de los residentes inscritos en las listas del paro, este año ese porcentaje se ha elevado hasta el 32,3 por ciento.
Las cifras del SEPE permiten discernir qué tipo de ingresos del Estado perciben los menorquines en paro y con derecho a prestación. Del total de 2.371 beneficiarios, 1.050 (el 44,2 por ciento) lo hacen del llamado nivel contributivo, lo que se conoce vulgarmente como cobrar el paro (por lo cotizado –un mínimo de 360 días–). Por contra, el número de personas que no tienen derecho o ya han agotado el paro y reciben una ayuda de nivel asistencial son 1.316 personas (el 55,5 por ciento).
La cifra de personas que reciben esas ayudas o subsidios de nivel asistencial ha caído en 222, un 14,4 por ciento, sin embargo, de un año a otro, el peso específico de estas ayudas de emergencia ha aumentado. En 2014 las personas que recibían la ayuda de 426 euros, ya sea en forma del subsidio, de la Renta Mínima de Inserción o del Programa de Activación para el Empleo representaban el 52,4 por ciento del total.
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