«De estas ayudas no vamos a ver ni un euro». Así de claro y preocupado se mostraba el presidente de Federación Agrícola y Ganadera de Menorca (FAGME), Pau Bosch, ante la aprobación ayer por parte del Consejo de Ministros del Real Decreto que establece subvenciones de 300 euros por vaca (hasta un máximo de 10.000 euros por explotación) a los ganaderos cuyos ingresos están por debajo de los costes de producción.
Según explica Bosch, «por las informaciones que tenemos», parece que el baremo para determinar si una explotación es rentable se ha fijado en el precio por el que venden la leche. Y en Menorca debido a los elevados costes de la insularidad se vende más cara (en torno a los 33 céntimos por litro) que en el resto de la Península (26 céntimos).
Bosch lamenta que las ayudas no contemplen la insularidad, ya que «nuestros costes de producción son más elevados» que los de los ganaderos peninsulares, de allí que el precio de la leche esté más alto, aunque ello no garantiza su rentabilidad. «La insularidad hace que estemos más perjudicados que el resto de ganaderos que venden a un precio más barato», apunta Bosch.
No obstante, todavía falta conocer la letra pequeña del Real Decreto que determina las subvenciones, y si estas tienen en cuenta de un modo u otro los costes de la insularidad a la hora de fijar el baremo, para medir la rentabilidad.
El plan de ayudas para el sector lácteo está dotado con 20 millones de euros para toda España. Está dividido en dos tipos de subvenciones. Por un lado, las de 300 euros por vaca a las fincas no rentables, de las que los payeses menorquines dudan que se puedan beneficiar. Y por el otro, una subvención de 110 euros por vaca (también hasta un máximo de 10.000 euros por finca) para los ganaderos que pese a cubrir los costes de producción, no han conseguido rentabilizar las inversiones en modernización. En este caso, hay más posibilidades de que los payeses menorquines se puedan acoger a esta convocatoria.
El Ministerio de Agricultura calcula que se beneficiarán de estas ayudas unas 5.600 explotaciones, de las cuales 1.700 recibirán la subvención de 300 euros por vaca y unas 3.900 fincas se acogerán a la ayuda de 110 euros por ejemplar.
En breve, el Ministerio tiene previsto elaborar una relación provisional con los potenciales beneficiarios, que también colgará en su página web.
Según la ministra Isabel García Tejerina los ganaderos podrían empezar a cobrar estas ayudas a partir del próximo noviembre. Para García Tejerina, con estas medidas, junto a otros programas de financiación adoptados por el Ejecutivo, se ayuda económicamente a los ganaderos para que «ninguna» explotación tenga que cerrar.
Afirma que estas ayudas sirven para «aportar liquidez» mientras se consigue la recuperación de los precios en origen con «otras medidas» adoptadas y defiende que el Gobierno lleva «desde el principio de la legislatura» prestando el «máximo apoyo» a «todos» los ganaderos, pero «con especial énfasis» en el sector productor de leche y sobre todo desde que finalizó el sistema de cuotas.