Las explotaciones agrarias que opten a las ayudas del Contracte Agrari Reserva de Biosfera de 2016, promovido por el Consell insular, deberán disponer obligatoriamente de un plan para la evacuación de materias fecales, que tendrá en cuenta el número de cabezas de ganado, el sistema de barbecho y la distribución del estiércol, entre otros.
El conseller de Medio Ambiente y Reserva de Biosfera, Javier Ares, y el director insular de Medio Marino y Rural, Miquel Truyol, subrayaron este miércoles que el contrato agrario, que cuenta con un presupuesto anual de 530.000 euros, está dirigido a los agricultores profesionales, que ofrecen unos servicios ambientales con los que contribuyen a la sociedad menorquina. El plan de evacuación de los residuos fecales está ligado a la prioridad de llevar a cabo una mejor gestión de la calidad del agua y evitar la contaminación por nitratos de los acuíferos.
La convocatoria contempla la posibilidad de adoptar hasta un total de 18 compromisos voluntarios que se compensan económicamente con 3.000 euros por explotación. Esta cantidad puede verse incrementada hasta los 4.000 euros en el caso de que se adquiera otros compromisos, como tener mujeres aseguradas a jornada completa, participar en estudios promovidos por la Administración pública, disponer de un acuerdo de custodia, o dedicarse a la producción ecológica.