Nuevo caos provocado por la cancelación de un enlace de Vueling entre los aeropuertos de Barcelona y Menorca, concretamente el vuelo 3718. La salida estaba prevista desde la Ciudad Condal a las 20.55 horas del pasado sábado y, tras seis horas de espera, dejó literalmente tirados en tierra a 180 personas, provocando la indignación de los pasajeros a los que no se les facilitó hotel para pernoctar ni dietas de manutención.
El primer capítulo de esta historia, relatada por los propios afectados, se inició cuando los pasajeros estaban esperando para embarcar y se les comunicó que, por un problema de tripulación, el vuelo retrasaba su salida. Tras la espera, llegó un nuevo avión de la compañía, pero con menos capacidad de asientos, por lo que Vueling decidió entonces que las 16 últimas personas en facturar no podrían embarcar.
Uno de los afectados explica que se les comunicó que se les darían 150 euros para el hotel y la cena. Sin embargo, los clientes tuvieron que adelantar el coste de los gastos, ya que la compañía sólo les abonaría el dinero tras efectuar una reclamación y que ésta fuera validada, en un plazo indeterminado.
El resto de pasajeros, unos 180 (entre ellos muchas familias con niños), siguieron esperando en vano la salida del vuelo 3718. Mientras, el nerviosismo iba en aumento. Hacia las 2.30 de la madrugada, desde Vueling se les comunicó que finalmente había sido cancelado y que, al igual que al anterior grupo, no podían ni reservarles un hotel ni darles dinero para comida, por lo que las quejas y protestas fueron en aumento. Tampoco se les especificó cuándo podrían viajar a Menorca. Las 16 personas que se quedaron fuera del embarque en primera instancia fueron llegando ayer a Menorca en diferentes vuelos.
Día complicado
AENA confirmó este domingo el incidente, pero fue imposible recabar la postura de la compañía. El aeropuerto de Menorca vivió este domingo un día complejo, con dos vuelos cancelados, el de las 12.10 horas con destino a Colonia y el de las 14.05 horas con dirección a Innsbruck. También se retrasaron las salidas de los vuelos de las 11.55 horas con destino a Barcelona, en código compartido entre las compañías Iberia y Vueling, así como los de Düsseldorf (12.40 horas), Milán (13.00 horas) y Bérgamo (13.30 horas).
Desde Aena explicaron este domingo que los retrasos del domingo no superaron las dos horas, por lo que, según defendieron, entran dentro de la «normalidad» debido, por ejemplo, a las condiciones meteorológicas o imprevistos de las compañías.
Indignación en la red: «Esperas eternas y sin explicación, no se puede permitir»
La noticia de una nueva cancelación de Vueling en la ruta entre Menorca y Barcelona provocó la indignación de pasajeros y lectores: «Ayer noche muchos niños pequeños y adultos del vuelo frustrado a Menorca durmiendo en el suelo en el aeropuerto de Barcelona, ya que Vueling no facilitó hoteles.
Esperas eternas y ninguna explicación. ¡Indignante! ¿Cómo se puede permitir esto?». Este comentario resume el sentir generalizado. Las invitaciones a reclamar también: «Nosotros tuvimos un problema parecido hace unos años, reclamamos. Estuvimos casi dos años de papeleo pero finalmente nos indemnizaron con 250 euros por pasajero. Invito a todos a que reclamen».