Las máquinas que se encargan de la retirada de la posidonia de las playas aprovecharon ayer por la mañana su presencia en Es Grau para echar una mano a S'Albufera. El viento de componente norte había cerrado el riachuelo que habitualmente la conecta con el mar. Los trabajadores del Parc Natural lo suelen abrir a mano cuando esto sucede, es lo preferible, pero el viento es implacable (este verano también frecuente) y por ello se optó por una intervención más contundente. Si es necesario, se repetirá.
El estado actual de S'Albufera des Grau no permite largas restricciones con la entrada de agua.La sequía ha dejado a la zona húmeda en unos niveles de agua muy bajos por la época del año en que nos encontramos. Desde el Parc Natural, los técnicos explican que la situación es inédita en los últimos años, incluso en la última década. Por ello, no quieren prescindir del agua del mar. Yhay que hacerlo con tiempo, abriendo las compuertas de forma comedida, manteniendo el equilibrio, para evitar tener que actuar cuando la situación sea ya más acuciante y de golpe, lo que produciría un exceso de salinidad en S'Albufera.
En estos momentos, explican técnicos del parque, el agua en S'Albufera está 40 centímetros por debajo del nivel de referencia del mar. Lo normal es que estas cifras, incluso algo superiores, se den en pleno agosto, cuando el verano ya languidece, no antes. Los problemas serios empiezan a menos de 60 centímetros, una cantidad de agua que no se puede mantener más de diez días. Para evitarlo, porque no es una época del año en la que suela llover y la evaporación va haciendo su trabajo, se ha decidido tomar ya estas medidas controladas y progresivas. Por suerte, S'Albufera des Grau está siempre bien vigilada y cuidada.