El obispado de Menorca aboga por seguir celebrando funerales en cuerpo presente, motivo por el cual reclama a las autoridades civiles que «sean tolerantes, respetando las creencias de las personas que soliciten su celebración en nuestras parroquias, como se ha venido haciendo hasta ahora».
En un comunicado, asegura que el traslado de los difuntos «en nada se opone a las normas sanitarias», exceptuando aquellas defunciones que se produzcan por enfermedades infecto-contagiosas.
Responde así a la intención de la Conselleria de Salud y Consumo de acabar con este tipo de funerales, impidiendo el traslado de los féretros a ningún lugar público o privado que no sea el tanatorio, tal y como se expone en el borrador del nuevo decreto sobre sanidad mortuoria que está tramitando.
[Lea la noticia completa en la edición impresa o en Kiosko y Más o My News]