Medio Ambiente del Consell registró 19 expedientes por infracciones en la Reserva Marina Norte de la Isla entre 2014 y 2016. La mayor parte de las multas, cualificadas como graves, fueron para pescadores recreativos y solo se sancionó a un pescador profesional el año pasado. En total la institución recaudó entre 5.513 y 5.851 euros cada año, por pescar sin licencia, por pesca submarina, pesca sin boya o en una zona prohibida de la Reserva.
Las cifras de las sanciones son bajas, de entre 151 y 2.851 euros, si se comparan con el máximo que se podría poner por ley a las infracciones graves. Para recreativos van de 151 a 30.000 euros y para profesionales pueden ascender hasta 60.000 euros de acuerdo con los criterios establecidos en la Ley de Pesca de Balears 6/2013.
Para el director de Medio Rural y Marino, Miquel Truyol, el número de sanciones en los últimos tres años presenta una tendencia similar a las infracciones registradas desde 2011, cuando el Govern traspasó las competencias sobre la Reserva al Consell.