La polémica que ha generado el borrador del decreto de sanidad mortuoria elaborado por el Govern le ha obligado a volver a la casilla de salida y reiniciar la tramitación de nuevo.
La decisión se ha tomado con la intención de incorporar los comentarios y quejas que han llegado a la Conselleria de Sanidad, la mayoría de los cuáles hacen referencia a la prohibición de la celebración de funerales de cuerpo presente, una tradición muy presente en Menorca.
Así lo asegura la directora general de Salud Pública y Participación, Maria Ramos, que explica que para poder atender a las demandas ciudadanas se ha archivado el decreto, que ya había superado la fase de alegaciones.
Se elaborará un nuevo documento en el que se deja «un poco abierta la puerta» a celebrar este tipo de funerales aunque bajo «condiciones muy restrictivas», sostiene. «Tendremos en cuenta las peticiones, pero mantendremos el espíritu original del decreto», asegura Ramos, que recuerda que la prohibición de los funerales de cuerpo presente se remonta al decreto de 1996.