Hace años que los partidos políticos, de todos los colores, tienen en sus manos diferentes informes que avalan las ventajas que generaría la implantación de la tarifa plana universal en vuelos interislas. Una de las conclusiones más destacadas de todos ellos es que abaratar el precio de los billetes de avión tendría un efecto multiplicador en el gasto turístico.
Es una de las tesis que defiende la Fundació Universitària del Bages, perteneciente a la Universidad de Manresa, en su trabajo titulado «Estudio de la obligación del servicio público en el transporte aéreo de Menorca» elaborado en octubre de 2013.
En él, sostiene que facilitaría la movilidad interior y, por tanto, la llegada de turistas procedentes de otras Islas. Según sus cálculos «una derivación de un 1 por ciento de los turistas de Mallorca hacia Menorca durante un 10 por ciento de su estancia en Mallorca gracias a una ruta Palma-Menorca atractiva, representaría un incremento del gasto turístico anual para Menorca de 7 millones de euros. En este sentido, concluye también que «el potencial de un incremento de turistas nacionales no residentes es de 3,5 millones para cada punto porcentual de incremento solo para el caso de la ruta Barcelona-Menorca».
En cualquier caso, demuestra la ineficacia del actual sistema de OSP, puesto que la evolución de este modelo muestra un incremento de tarifas por encima del IPC, que todavía perjudica más a los residentes.
Pionero
Fue el Govern de Jaume Matas en el año 2006 quien encargó el primer estudio. La propuesta detallaba que «el transporte aéreo Balear tiene una significancia esencial para el desarrollo económico, turístico, cultural y social, especialmente para las islas periféricas». Por ello aboga por incrementar la inversión pública para que el precio de los billetes pueda reducirse hasta 30 euros. Calcula que sería necesaria una inversión de 31,2 millones, teniendo en cuenta que el sistema de descuento para residente cuesta 17 millones de euros.
Por último, el estudio de Avio Consulting discrepa también de los argumentos de Fomento y apunta que el sobrecoste sería tan solo de 8 millones de euros.