Desde el inicio de la temporada alta, las playas vírgenes ubicadas al sur de Ciutadella han registrado una notable presión humana. Acuciados por la gran fama que estas zonas del litoral han registrado durante los últimos años ?la imagen de unos yates flotando en Macarella ha dado literalmente la vuelta al mundo? los visitantes de la Isla tienen claro que uno de los objetivos de su estancia en Menorca es conocer de primera mano unas calas que no tienen nada que envidiar a las de zonas tan lejanas como el Caribe.
Macarella, Macarelleta, Cala en Turqueta, Son Saura y Es Talaier se han convertido en uno de los grandes atractivos de la Isla por la calidad de sus aguas y su entorno natural. Sin embargo, las opiniones vertidas por los turistas en los últimos tres meses después de pasar una jornada en cada una de ellas son bastante diferentes, con aprobados raspados o sobresalientes claros.