Si usted reside en Menorca, la alta salinidad que registra el agua que sale del grifo no le sorprenderá. La calidad del caudal suministrado en los ocho municipios lleva mucho tiempo en entredicho y los registros oficiales del Observatorio Socio Ambiental de Menorca (Obsam) no contradicen esta lectura. Así, los últimos datos oficiales –publicados ayer– atestiguan que en cinco de los quince puntos analizados se supera el nivel máximo de cloruros que permite identificarlos como aptos para el consumo. Cuatro de ellos están ubicados en Ciutadella y uno en el término municipal de Maó.
David Carreras, director del Obsam, explicó ayer «Es Diari» que «destacamos estos datos porque se trata de los quince pozos más estables de la Isla. Además, están repartidos de forma uniforme por todo el territorio. Disponemos de datos desde el año 1997 y podemos analizar tendencias temporales».
En un tercio de esos quince puntos se superan los 250 miligramos de cloruros por litro, cota que marca el límite para que el agua sea apta para uso humano. De hecho, el nivel promedio de cloruros es de 261,34 miligramos por litro. Carreras comentó que «los ayuntamientos y las empresas suministradoras mezclan el agua de estos pozos que exceden los límites con otros que sí están bien. Así, como resultado final pueden ofrecer un agua al consumidor que cumpla la normativa». Para que el agua sea apta para consumo agrícola no debe rebasar los 200 miligramos de cloruros por litro, 50 miligramos menos que los fijados para consumo humano. Desde el Obsam apuntaron que «es un dato que puede chocar, pero esto es así porque si los cloruros se depositan en el suelo las consecuencias son muy perjudiciales para los cultivos».
Nitratos
Por último, los registros también confirman que en siete de los quince pozos estudiados se superan los ratios de contaminación por nitratos, con un nivel promedio de 49,85 mg por litro. Los datos pertenecen al cierre del ejercicio 2016.