La Dirección General de Consumo del Govern recibió el año pasado cerca de 600 reclamaciones, de las que el 7,5 por ciento, es decir, unas 46, estuvieron relacionadas con prácticas de empresas de alquiler de coches que disgustaron al usuario. La cifra refleja una reducción del número de reclamaciones que el consumidor efectuó en 2016 cuando este sector de los rent a car acumuló 53 quejas. Pese a que la bajada no es muy significativa, el director general de Consumo, Francesc Dalmau, apunta a una disminución paulatina de las reclamaciones que se interponen por prácticas abusivas y desleales en este sector. Considera que los distintivos de calidad que entrega el Govern a las empresas que cumplen el código de buenas prácticas y demuestran transparencia y completa información sobre su producto ha sido clave para reducir la mala praxis en el sector. En Menorca, recogieron este miércoles este sello 13 empresas.
Dalmau explica que el sector del alquiler de coches ocupa en estos momentos «la cuarta posición en número de reclamaciones, aunque lejos de la telefonía y el transporte aéreo» que lideran el ranking. El director general de Consumo concreta que los usuarios se dirigen al departamento por cobros indebidos en sus tarjetas por desperfectos en el vehículo que ellos no han ocasionado, abusos en la retención de sus cuentas en concepto de depósito y grandes retrasos para recoger el vehículo, en especial en aquellas empresas que tienen sus oficinas fuera del aeropuerto. También hay reclamaciones por la política de combustible.