El departamento de Medio Ambiente del Consell ha dado un impulso a la erradicación de las plantas invasoras que amenazan la flora autóctona. Ha destinado a estas tareas en torno a 30.000 euros de la partida de 120.000 euros que el Govern dedicó en 2017 a actuaciones en el marco de la Reserva de la Biosfera. El año pasado, tres brigadas extrayeron un total de 39.700 kilos de material vegetal en un total de quince puntos localizados más en concreto en los términos de Ciutadella y Maó.
Aunque estos trabajos de erradicación de especies exóticas se lleva realizando desde el año 2000 con la campaña Life Flora, por primera vez se han llevado a cabo actuaciones verticales en el acantilado, en concreto, entre la zona comprendida entre Sa Mesquida y La Mola.
El técnico de Medio Ambiente, Álex Cortada, explica que en estas zonas de acantilado hay plantas endémicas únicas que no se encuentran en nigún otro enclave, de ahí la necesidad de actuar en estas zonas para evitar su decrecimiento. Por otra parte, los acantilados actúan como reservorio y de zona de expansión de las plantas exóticas, por lo que "volverían a rebrotar" si no se ataca este punto.
La primera acción en zonas verticales se realizó entre octubre y noviembre y fue entre Es Cap Negre y Ses Àguiles. Ahora vuelven a actuar en Sa Mesquida, unos 200 metros hacia el este. También actuarán entre Es Murtar y Es Cap Negre. Cuando concluyan las tareas habrán eliminado del acantilado otras 20 toneladas de material vegetal.