La asamblea de Volem Sant Lluís cierra filas con los representantes de la formación en el Ayuntamiento con respecto a las dudas vertidas por sus socios de gobierno -PSOE y el PI- sobre una comida de la alcaldesa con el asesor jurídico y otros comensales en un restaurante de Es Castell.
La asamblea da, incluso un paso más, y pide a sus concejales que «valoren seriamente si deben seguir con estos socios» puesto que considera que «una labor de tanta responsabilidad no puede quedar manchada por unas actitudes como estas, que nada tienen que ver con la buena gestión de este Ayuntamiento».
La asamblea insta a los responsables municipales a seguir con su trabajo y les anima a «que no se dejen someter por actitudes que nada tienen que ver con la gestión económica, la transparencia y la participación que son retos importantísimos a los que nunca renunciaremos como base ética de la agrupación». Y recuerda retos conseguidos como la rebaja en dos millones de la deuda financiera, el incremento del remanente de caja o el aumento en un 30 por ciento del área de Servicios Sociales.
Critica duramente a los socios de gobierno que «ante las próximas elecciones de 2019 ponen sus intereses partidistas por encima de las necesidades de los ciudadanos de Sant Lluís» y tacha de «intolerable» la actitud del PSOE con los que «deberían ser compañeros de viaje». Agrega que están comprobando «desde hace un tiempo» que algunos socios de gobierno «están dispuestos a menospreciar el trabajo de tres años para afrontar con ventaja las próximas elecciones».