El puerto exterior de Ciutadella cuenta desde el pasado mes de noviembre con un sistema más preciso para medir el viento, el oleaje y la agitación de las aguas interiores. Ports invirtió 65.000 euros para instalar una estación meteorológica, un sensor de oleaje y dos mareógrafos en el dique y en la bocana del puerto. El objetivo, tener información más precisa para evitar cierres innecesarios.
Y, a tenor de las primeras estadísticas, parece que el resultado es positivo. Entre el pasado noviembre y principios de este mes de marzo, el puerto de Ciutadella ha estado cerrado por mal tiempo cerca de 203 horas. El mismo periodo del año anterior, y sin los mareógrafos, el dique se clausuró en total algo más de 308 horas. Se trata de una reducción del 34,2 por ciento.
Lo que realmente mantiene la operativa de los barcos son las condiciones de meteorologicas que permiten trabajar en ellos, no los mareografos. Si el puerto está mal ubicado, los mareografos no lo salvan. ¿¿¿O es que 5 cms arriba/abajo hacen realmente que el puerto abra o cierra???