En los últimos años han proliferado los agroturismos y los hoteles de interior en los cascos urbanos, pero hacía al menos una década que no se construía y abría un nuevo hotel en una urbanización del litoral de Menorca. Hasta este sábado que, en principio, abrirá sus puertas el nuevo complejo de la cadena hotelera menorquina Set Hotels, ubicado en la urbanización de Sant Tomàs.
Se llama Hotel 55 Santo Tomás, y está situado en el Sector C de la urbanización de Es Migjorn, en la zona que va entre el hotel Victoria Playa y la parte alta de la urbanización. Es un complejo basado en el modelo impuesto por el PTI, es decir con poca altura y de alta categoría. Es un cuatro estrellas superior y el complejo está distribuido en planta baja y dos pisos, en una parcela de unos 23.000 metros cuadrados, situada a unos 250 metros de la playa de Sant Tomàs. Alberga un total 329 plazas turísticas, distribuidas en sus 165 habitaciones, de las cuales seis están adaptadas para discapacitados.
Tiene hasta cuatro piscinas, una de ellas cubierta y climatizada, además de espá, gimnasio y una zona deportiva al aire libre. No falta un bar y un restaurante, y también dispone de una sala multifuncional de 183 metros cuadrados, con una capacidad para 200 personas.
Las obras del complejo, a cargo de la empresa Antonio Gomila, han durado 19 meses, ya que se iniciaron a mediados de octubre de 2016 y se están ultimando a contrarreloj los últimos detalles para proceder mañana a su apertura. El Ayuntamiento de Es Migjorn concedió la licencia de obras en julio de 2016, en base a un presupuesto (solo en obras) de ocho millones de euros.
15 años para hacerse realidad
El proyecto de construir un nuevo hotel en esta zona, por parte de Set Hotels, se remonta a hace ya unos 15 años, con la aprobación del PTI de 2003, que redujo sensiblemente la superficie edificable en Sant Tomàs. En esa época se aprobó el primer convenio entre Ayuntamiento y Agrytursa (propietaria de la parcela y empresa hermana de Set Hotels) para urbanizar la zona, para que pudiera acoger 60 viviendas y un hotel de 350 plazas. El convenio preveía la cesión de dos parcelas (valoradas en 246.000 euros) al Ayuntamiento, en base al 10 por ciento de aprovechamiento medio.
Pese a ello, la situación se encalló. La secretaria municipal no avaló dicho convenio, al considerar en 2007 que al Ayuntamiento le correspondería unos terrenos por valor de 516.000 euros. En noviembre de 2008 se firmó un nuevo convenio, con este nuevo importe, lo que convertía al Ayuntamiento en copropietario de los terrenos. Se firmó que si Agrytursa quería construir el hotel y las viviendas debería comprar al Consistorio su parte, y sino pagaba en metálico no habría licencia de obras. Paralelamente se estaba tramitando el cambio urbanístico, con la aprobación del Plan Parcial del Sector C, lo que obliga a un cambio de las Normas Subsidiarias y elevarlo al Consell.
Pero vino la crisis, y el proyecto quedó apartado. Se retomó en 2014, pero con la tramitación en marcha, la empresa propuso que se intercambiaran los usos (es decir que el solar hotelero fuera para viviendas y el residencial para el hotel). Ello hizo que se tuviera que volver a iniciar los trámites para aprobar los cambios urbanísticos y firmar de nuevo el convenio, hasta que en julio de 2016 el Ayuntamiento le concedió la licencia de obras, no sin antes cobrar los 340.000 euros por su parte de la parcela hotelera y otros 350.000 euros en tasas e impuestos.