Jean-Marie Lefevre, un empresario del sector farmacéutico francés, es el propietario a través de las sociedades Formet Nou SL y Formet Vell SL de estas dos emblemáticas fincas del distrito de Sant Climent. Las casas de ambas gozan de un emplazamiento distinguido, son visibles desde las carreteras de Binidalí y Es Canutells y constituyen un hito en el paisaje de la zona.
Formet Nou, el lloc que obtuvo licencia municipal para consturir un hotel rural, fue comprado por Lefebvre y su esposa en octubre de 2013. Era la segunda operación inmobiliaria en la Isla después de haber decidido apostar por Menorca casi dos años antes con la compra de casa y terrenos anexos en Sa Mesquida.
Algunos que han tratado con la familia informan que además, como ha ocurrido en otros casos, Lefevre ha ejercido de puente para la llegada de otros inversores. Descartó la opción del hotel, aunque renunciar a ese derecho le supusiera un desembolso de 190.000 euros en el Ayuntamiento de Maó. En 2014 obtuvo licencia para la reforma de vivienda unifamiliar, con uso residencial y construcción de una piscina.
3,4 millones pendientes
La adquisición de Formet Vell, predio gemelo con el que sumar una superficie total de 136 hectáreas, debió de aparecerse de inmediato en sus planes de inversión en la Isla, aunque la operación técnicamente no se ha culminado todavía. El acuerdo mediante opción de compra con las hermanas Lourdes y Marta Simonet de Olives, propietarias por herencia de la finca, se alcanzó en enero y así se firmó ante notario.
Se desconce la cantidad en la que se ha cerrado la compraventa, lo que se sabe es que el plazo para culminar el pago pactado es un año y la cantidad pendiente son 3,4 millones de euros más los intereses correspondientes. Fuentes próximas a las transmisiones de fincas rústicas señalan que se están vendiendo a un precio medio de cinco millones de euros, aunque la cantidad es muy variable y supeditada a la superficie, valor de las construcciones, situación, expectativas de rendimiento y otros factores. «El mercado está más animado que nunca y el valor como en todo es el precio que está dispuesto a pagar el comprador», explica un experto en estos negocios.
Ambas fincas tienen el mismo administrador único y la misma estructura, una SARL (Sociedad a Responsabilidad Limitada), que es una de las formas jurídicas más utilizadas en Francia.
Sobre el destino que se dará a este terreno, cada vez más forestal y con menos áreas de cultivo, fuentes que han tratado con la nueva propiedad apuntan hacia un proyecto de naturaleza artística dado que los dueños poseerían una importante colección de arte. Lo que ya es visible, sin embargo, son los hoyos que está realizando una excavadora para la siembra de olivos. El payés que se encargaba de las fincas continúa con su labor.
¿Quién es Jean-Marie Lefevre?
Después de una etapa como director general de Pommery, una conocida firma de champán, emprendió el año 2000 una nueva etapa empresarial también como director general de los laboratorios Biocodex, en Beauvais, al norte de París, donde ha desarrollado nuevos complementos nutritivos para la salud del deportista. En poco tiempo pasó de 250 a 960 asalariados y la facturación se situó en 260 millones de euros.