Donde sea, pero a Menorca y al resto de Balears no. Es el mensaje que lanzan los nuevos funcionarios de la Península cuando tienen que plantearse su primer destino tras superar las oposiciones después de muchas horas de estudio. No es que no les guste la Isla, el problema es, por un lado, su fama –merecida– de territorio con una escasa y cara oferta de viviendas de alquiler y, por otro, la pírrica compensación por destino que ofrece el Ministerio, hasta siete veces inferior que en otros territorios no peninsulares.
Los últimos en alzar la voz han sido los funcionarios de tramitación procesal de nuevo ingreso, que han visto como el Ministerio de Justicia –con el objetivo de solucionar los crónicos problemas de personal en las Islas– ofrece el 66 por ciento de los puestos a cubrir en los juzgados de Balears (18 de ellos en Menorca). En la práctica, denuncian, les están «forzando» porque los primeros en escoger destino son los aprobados de promoción interna.
El gran freno para escoger Menorca como destino es la indemnización por residencia en el territorio nacional, el complemento de destino. Un tramitador procesal que acepta venir a Menorca recibe 90,83 euros al mes, mientras que en otros territorios no peninsulares como Ceuta y Melilla ese extra mensual es de 669,35 euros, a los que hay que sumar 41,5 euros por cada trienio que permanezcan en el destino: «Los más de 300 funcionarios destinados a las Islas tendrán que buscar alojamiento en 20 días en plena burbuja del alquiler», lamenta David Bas, uno de los aprobados de la última oposición, que se han organizado para reclamar al Gobierno que abra el abanico de destinos (en este caso del ámbito no transferido) para no tener que venir a Balears.
El complemento salarial que perciben los funcionarios de fuera de Menorca se revela muy bajo cuando se tiene en cuenta que escasean los alojamientos de menos de 600 euros (los únicos dos hallado a día de ayer estaban en Es Mercadal), mientras que en otros territorios como Ceuta y Melilla la oferta es mucho más abundante y barata. Menorca también sale perdiendo como destino laboral en comparación con Canarias, y en especial con las islas menores del archipiélago atlántico, donde los pisos cuestan más o menos lo mismo que en Menorca, pero el complemento –en el caso de los tramitadores, que cobran de sueldo base entre 1.200 y 1.300 euros– se eleva a 409,67 euros.
Problema extendido
No es ni mucho menos un problema que solo ataña a los funcionarios de Justicia. Seguridad Social, Cuerpos de Seguridad del Estado, Tráfico, Agencia Tributaria, Instituciones Penitenciarias... Son algunos de los ámbitos de la Administración General del Estado que acumulan vacantes por un problema similar, la baja compensación por vivir en una isla donde el precio de los alquileres, y más en pleno 'boom' del alquiler turístico, es en algunos casos inasumible.
David Rodríguez, del sindicato UGT de prisiones, explicaba ayer que tienen el mismo problema: «Aquí están viniendo los últimos de la promoción» por lo poco atractivo de un destino donde el complemento salarial es la mitad que en Tenerife y en Gran Canaria y mucho menor en el caso del resto de islas canarias: «Sin hablar de Ceuta y Melilla. Allí con esa indemnización pueden pagar el alquiler, aquí apenas da para pagar el recibo de la luz».