El presidente de Autoridad Portuaria de Balears (APB), Joan Gual de Torrella, ve con buenos ojos la idea de habilitar una zona de desembarque en La Mola para los pasajeros de grandes cruceros y que éstos puedan quedar fondeados en la bocana del puerto de Maó. Se trata de los megabuques cuyas dimensiones no les permiten operar en el interior de la rada y que en los últimos años dominan este segmento turístico, lo que ha hecho que Maó quede descartado como escalas en algunos de estos cruceros por el Mediterráneo.
La propuesta surgió de la comunidad portuaria este martes, durante la celebración del Consejo de Navegación y Puerto de Maó y Gual de Torrella aseguró tras el encuentro que por parte de APB esta obra podría estar lista en 2019.
La preocupación por el posicionamiento de Maó en el mercado internacional de cruceros, y el tamaño cada vez mayor de estos barcos, fue una de las cuestiones debatidas por el consejo.