El puente de Todos los Santos empezó con mal pie para una familia menorquina debido a una fallida conexión aérea en Palma y acabó con un trayecto de cuatro horas en autobús entre Valencia y Barcelona, en lugar del vuelo que habían contratado de regreso a la Isla con Vueling. El viajero Kike Sastre no se ha querido limitar a presentar una reclamación y dejar pasar la frustración causada ?una vez más?, por los retrasos y cancelaciones de las aerolíneas porque «juegan con tu tiempo y éramos más de 80 personas cada una con sus problemas, sus circunstancias y sus enlaces perdidos», relató ayer a «Es Diari».
Este menorquín, su mujer y su hija salían el jueves día 1 con destino a Valencia vía Palma en el primer vuelo de la mañana entre Maó y Mallorca. Toda su reserva se realizó a través de la web de Iberia, con las conexiones «que ellos te ofrecen», es decir, de Maó a Palma en Air Nostrum y de ahí a Valencia en Vueling, la compañía con la que también debían regresar haciendo escala en Barcelona.