El I Plan de Igualdad de Trato y Oportunidades, que el Ayuntamiento de Sant Lluís ha aprobado recientemente de forma inicial, enuncia que «la visión que puede tener una mujer sobre como está diseñada la ciudad es diferente de la que puede tener un hombre». Así, añade que para favorecer un «entorno urbano igualitario» se debe introducir la perspectiva de género en el «diseño del municipio», con el fin de que las mujeres se sientan «seguras, visibles, cómodas e integradas» en los espacios públicos y que estos no sean discriminatorios.
En esta línea, en el mismo documento también se expone que «históricamente la construcción y el diseño de una ciudad ha sido competencia y responsabilidad masculina». Podría ser un aval de esta afirmación el hecho de que de los ocho municipios de la Isla, en tan solo uno de ellos el Área de Urbanismo sea gestionado por una mujer. Se trata de Maó, frente a los siete restantes, donde esta es llevada por hombres, inclusive Sant Lluís. De hecho, el Plan reconoce que en el equipo de gobierno existe una «distribución tradicional de responsabilidades asignadas por sexo, a excepción del departamento de Cultura».
Ante este diagnóstico el Plan de Igualdad expone una serie de propuestas de actuación al respecto, como por ejemplo, establecer criterios para evitar la creación de lugares donde las mujeres se sientan inseguras, habilitar caminos rurales para que sean más seguros, iluminándolos, o mejorar los espacios de práctica deportiva al aire libre. «Son acciones que se irán llevando a cabo siempre y cuando la normativa lo permita», añade la concejala de Servicios Sociales, Maite Martínez, del departamento desde donde se ha llevado a cabo y redactado el Plan de Igualdad.
Asimismo, este incluyen otros siete ámbitos de actuación. Son Igualdad como principio de actuación municipal, Participación ciudadana, Conciliación, Educación en valores igualitarios, Ámbito laboral, Violencia contra la mujer, y Salud, que juntamente con el de Urbanismo y Seguridad impulsan un total de 76 medidas. «Se trata de un plan integral que implica a todas las áreas», afirma.
Como inminentes, Martínez señala que a partir del 2019 se empezará con las actuaciones que conciernan al Ayuntamiento.
Por otra parte, explica que el Plan es una «guía a seguir» que debe ir ejecutándose independientemente de que siga o no el equipo de gobierno actual. «Se trata de una obligación social y moral. Una deuda que se tiene con más de la mitad de la sociedad», concluye Martínez.