El equipo de gobierno del Consell está abierto a impulsar viviendas colaborativas en Menorca, a través de proyectos de cohousing o de covivienda. Así lo asegura la vicepresidenta segunda y consellera de Servicios Generales, Participación Ciudadana y Vivienda, Cristina Gómez, tras reunirse el pasado jueves con miembros de una asociación menorquina de cohousing.
Y es que la nueva Ley de la Vivienda de Balears permite al Consell la adquisición de suelo público para que lo pueda ceder para vivienda social. Gómez cree que «en un futuro sería factible» que este suelo se pudiera ceder, previo concurso público, a una cooperativa para que impulsara algún tipo de proyecto de vivienda colaborativa.
En este sentido, Gómez destaca que lo que haría el Consell es ceder el uso del suelo, para que la cooperativa construyera y gestionara las viviendas colaborativas, remarcando que el suelo seguiría siendo público, y por tanto «estaría fuera del mercado especulativo».
Las viviendas colaborativas es un fenómeno extendido en Europa y empieza a entrar en España, como una alternativa a los altos precios tanto del alquiler como de la compra de vivienda. Están gestionadas por cooperativas (que son las propietaria del inmueble) y los inquilinos son cooperativistas, con derecho al uso de la vivienda. El complejo dispone de muchos espacios y servicios comunes, lo que hace que se reduzca el coste. El tipo más común de covivienda es el regentado por personas mayores, que nace como alternativa a los geriátricos. De hecho, en Ciutadella se promueve un centro de este tipo de cohousing senior.
El Ibavi y la covivienda
El encuentro que mantuvieron Cristina Gómez y la asociación menorquina de cohousing fue una primera toma de contacto, y la consellera también recomendó a los miembros de la entidad ponerse en contacto con el Instituto Balear de la Vivienda (Ibavi), ya que ha licitado en Balears cuatro proyectos de covivienda, aunque de momento ninguno en Menorca.