El malestar en torno a la oferta pública de empleo convocada por el Consell se ha visto reflejado, al terminar el plazo para presentar recursos, con más de 200 sobre la mesa. Una suma que no sorprende a la institución insular que admite que la situación era «previsible» y que entra por completo dentro de la «normalidad».
Según explica la consellera Cristina Gómez, la mayoría de las alegaciones son muy similares y están orientadas en la misma línea. «Mayoritariamente todas incorporan el mismo argumento», indica Gómez. El conflicto parece estar en el sistema de valoración relativo a los años trabajados por los funcionarios interinos. «Ahora se valora como un mérito y los recursos piden que se utilice otra fórmula que sirva para consolidar, sin ningún riesgo, los puestos de trabajo», explica.