El Consell ha vuelto a rechazar las pretensiones del Ayuntamiento de Sant Lluís de que la institución insular colabore en el pago de la indemnización a la promotora Orfila SL, fijada en unos 11 millones de euros una vez contabilizados los intereses. La reclamación de responsabilidad patrimonial cursada por el Consistorio hace aproximadamente un año ha sido inadmitida por cuestiones de forma. Esta indemnización se está pagando ya desde el año 2017 (el juzgado fijó el abono en quince anualidades) y diversas sentencias judiciales han resuelto que el Consell no tiene responsabilidad alguna en este sentido.
A pesar de ello, el pleno del Ayuntamiento de Sant Lluís debe decidir este jueves si desiste en esta reclamación o si emprende un nuevo camino judicial a partir de un recurso contencioso administrativo contra la decisió adoptada por el Consell a finales de noviembre del año pasado. El plazo para hacerlo acaba el próximo 4 de febrero.