Cada vez más medicados por problemas de corazón, la depresión o la ansiedad. El consumo de fármacos relacionados con el sistema nervioso y el aparato cardiovascular no ha parado de crecer en los últimos doce años. Y es que, según los datos del Servei de Salut, se dispensan en las farmacias (mediante receta) más de 3.800 envases por cada mil habitantes en cada una de estas dos clasificaciones médicas.
Así se desprende de la Propuesta de Indicadores de Salud que ha elaborado el Observatori Socioambiental de Menorca (Obsam) junto con el departamento de Ocupación, Proyección Económica, Juventud y Deportes del Consell con el objetivo de analizar la salud y la calidad de vida de los menorquines en relación a los valores de sostenibilidad. Los datos hacen referencia a los medicamentos y productos sanitarios dispensados con receta médica, dejando fuera el consumo farmacéutico en los hospitales y los medicamentos que se han recetado a través de la atención privada.
Y estas cifras alertan de un incremento del 41,5 por ciento de la ingesta de fármacos relacionados con los factores de riesgo cardiovascular. Se trata de medicamentos para la hipertensión y el colesterol, entre otros. Mientras que en 2005 se prescribieron 2.692 envases por cada mil habitantes para estas enfermedades, a día de hoy las recetas han alcanzado las 3.808 unidades.
Por otra parte, los menorquines tienen dependencia a los ansiolíticos y antidepresivos: desde el 2005 su consumo se ha disparado un 25,2 por ciento. Mientras que hace doce ejercicios se recetaban 3.052 cajas de medicamentos por cada mil habitantes para problemas relacionados con el sistema nervioso, a día de hoy se rozan ya los 3.900 envases.
Si escudriñamos qué tipo de medicina es la más prescrita y consumida dentro de esta clasificación médica, destacan de forma notable los psicolépticos, es decir, ansiolíticos, hipnóticos y antipsicóticos. Se prescribieron en 2017 (último ejercicio analizado) 1.521 envases por cada mil ciudadanos, de los que 1.071 fueron, en concreto, ansiolíticos. Los analgésicos y los fármacos que se toman para incrementar el rendimiento físico y mental y los antidepresivos también representan un elevado volumen de ingestas. Se recetan también, aunque en menor proporción, fármacos para la epilepsia y el parkinson.
Otro de los grandes grupos de medicamentos que ocupa un puesto en el podio de los más consumidos son los relacionados con el aparato digestivo y el metabolismo. Se prescribieron 2.200 envases por cada mil habitantes, de los que la mitad son para tratar úlceras.
La autora del informe, la graduada en Biología Marina Bagur, asegura que al no disponer de datos del conjunto de Balears o de España no se pueden contextualizar ni conocer si las tendencias observadas son normales o si presentan algún patrón distintivo.