Una empresa especializada contratada por el Ayuntamiento de Maó ha realizado actuaciones de consolidación en tres puntos del acantilado del puerto, distribuidos entre la zona más comercial del Moll de Ponent y Cala Figuera, que de este modo han visto incrementada su seguridad.
En el Moll de Ponent, esta empresa colocó una malla y anillamientos en las inmediaciones del establecimiento comercial Castillo Menorca, del mismo modo que se saneó la vegetación del tramo del acantilado que se encuentra en las inmediaciones del conocido bar Akelarre. Ambos puntos están a pocos metros de distancia.
También se actuó en la cuesta de Cala Figuera. Con motivo de unas intensas lluvias se produjeron en este punto unos pequeños desprendimientos que, como precaución, obligaron a cerrar esta vía al tráfico rodado durante algunas semanas. Los profesionales de esta empresa retiraron diversos bloques de grandes dimensiones que amenazaban con desprenderse también. Una vez llevados a cabo estos trabajos, la cuesta de Cala Figuera se volvió abrir, ya sin riesgo alguno de nuevas incidencias, al tráfico rodado.