Consell y Ayuntamiento de Alaior firmaron en 2018 un convenio de colaboración para ejecutar obras de mejora de un tramo de la carretera que da acceso a la urbanización de Son Bou. Y ahora, un año y medio después el proyecto sigue sin estar concluido.
El Consistorio asegura que queda por ejecutar la parte que debe financiar el Consell, mientras que el departamento de Movilidad dice que no lo ha realizado a la espera de que el Ayuntamiento haga las gestiones con la propiedad para poder entrar a la finca.
El gobierno municipal ejecutó su parte en 2018. Consistió en la limpieza de los márgenes de la carretera y la sustitución y refuerzo de los quitamiedos que estuvieran en mal estado, además de repintar las marcas viales horizontales. La ejecutó con el apoyo financiero del 50 por ciento del Consell. Esta actuación tuvo un coste aproximado de 43.000 euros.
La parte que queda por ejecutar es un tramo de cien metros de talud cercano al acceso al polvorín que debe protegerse y mejorar su estabilidad. Caen piedras. Esta actuación está presupuestada en 86.670 euros y ha de ser financiada íntegramente por el Consell.
El convenio que rubricaron las dos partes para mejorar esta carretera de gran tráfico en verano acababa el 31 de diciembre de 2019. Y debido al incumplimiento de la totalidad de la actuación, el Consejo Ejecutivo celebrado a final de año aprobó una prórroga del convenio hasta el 30 de junio de 2022.
La consellera de Movilidad, Francesca Gomis, señala que están pendientes de que el Ayuntamiento les comunique que tienen permiso para entrar a la finca. Confía en que pueda llevarse a cabo este mismo año pero para no evitar que el fin del plazo aceche de nuevo, se ha alargado el convenio. Por su parte, el Ayuntamiento insiste en que la actuación está solo pendiente del Consell. «Nosotros ya hemos cumplido», resalta.