El personal del Ayuntamiento de Maó recibió ayer una botella recargable, con el logotipo oficial, que podrá rellenar con agua osmotizada procedente de las tres fuentes habilitadas en el edificio consistorial. Las fuentes de agua tratada son para el uso de los trabajadores y también del público en general, según informó ayer el Ayuntamiento en nota de prensa. La iniciativa corresponde al área de Medio Ambiente, que dirige Conxa Juanola, y persigue que los empleados puedan disponer de agua potable de calidad, depurada con los equipos de ósmosis, y no tenga que comprar botellas de usar y tirar. De este modo no solo se permite un ahorro económico sino también en residuos.
Con la medida el Ayuntamiento destaca el cumplimiento de la Ley de Residuos así como del convenio firmado con la organización ecologista GOB, según el cual la institución se comprometió a reducir el volumen de residuos plásticos que genera.