Las obras de la nueva planta de tratamiento de residuos de Milà avanzan a buen ritmo. Según informan desde el departamento de Medio Ambiente ya se ha instalado el 80 por ciento de la maquinaria de cribado y a pesar de que las labores relacionadas con la instalación eléctrica y con los suministros de pequeños proveedores –que han sufrido el paro de trabajos no esenciales- han ralentizado la ejecución, la afectación a los plazos será como máximo de unas pocas semanas.
Ya han sido instalados el tromel, el abrebolsas, los silos de materiales seleccionados, las cintas transportadoras y las cabinas de control de calidad. También han llegado los nuevos equipos de compostaje y se está preparando la obra civil necesaria para extender la solera de hormigón donde serán instalados. Se están tomando todas las medidas de seguridad, incluida la toma de temperatura a los trabajadores.