El conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, y la presidenta del Consell de Menorca, Susana Mora, han acordado este lunes que la entidad insular aportará 500.000 euros de euros a la convocatoria del Govern de ayudas extraordinarias para personas trabajadoras autónomas afectadas por las consecuencias de la COVID-19.
De esta modo, el Consell se suma a las medidas urgentes aprobadas en mesa de diálogo social para el reinicio y al mantenimiento del trabajo autónomo, y que también contará con aportaciones de todos los municipios interesados.
Así, sumando las aportaciones del Govern (644.000 euros) y el Consell de Menorca (500.000); Alaior recibirá 119.250 euros; Ciutadella, 393.135 euros; Ferreries, 63.308 euros; Maó, 314.062 euros; Es Mercadal, 65.590 euros; Sant Lluís, 85.713 euros; Es Castell, 84.684 euros, y Es Migjorn Gran, 18.255 euros
Tal y como han señalado desde el Govern en un comunicado, el objetivo de este paquete de medidas es ayudar a los autónomos a reiniciar su actividad una vez se ha iniciado el proceso de desescalada.
Se pueden presentar dos tipos de personas trabajadoras autónomas: aquellas que trabajan todo el año, pero se han visto afectadas por la declaración del estado de alarma, y los autónomos de temporada que este año no hayan podido iniciar su actividad.
El importe de las ayudas oscila en función de si tienen o no personas trabajadoras contratadas a cargo suyo: en caso de no tener, la ayuda es de 2.000 euros; en caso de tener una o dos, 2.500 euros; y en caso de tener más de dos, 3.000 euros. Además, se trata de una ayuda compatible con la prestación extraordinaria por cese de actividad aprobada por el Gobierno central y con haber hecho un ERTE.
Consecuencia del coronavirus ha sido el destape de algunos “trabajadores” que confiesan vivir solo de los ingresos que obtienen durante la temporada de verano. Y claro está, piden que los que trabajamos durante todo el año nos solidaricemos con ellos. Muy bien. Mientras ellos ganan un pastón durante tres meses (y se pavonean de ello), resulta que el resto del año cobran del paro y se van de vacaciones a destinos exóticos. No es que les desee ningún mal… Pero si esa fue su elección, que se atengan a las consecuencias. ¿No es esta una prueba mas de las maldades del monocultivo turístico?