Ataviados con el uniforme de campaña y el equipo correspondiente, sin armamento de ningún tipo, 17 soldados del Regimiento Palma 47 darán por finalizada este viernes una semana de ejercicios sobre el terreno en Menorca, dirigidos principalmente a contribuir a la preservación del Camí de Cavalls.
Aquellas maniobras de antaño que realizaban compañías completas de soldados de reemplazo en diversos enclaves de la Isla, con armas, ejercicios de camuflaje o movimientos tácticos, entre muchos otros, derivan hoy en día en muchas ocasiones, en otro tipo de objetivos relacionados con el cuidado de nuestro entorno, una misión más adaptada a la realidad y necesidades actuales.
Los soldados profesionales desplazados a la Isla en esta ocasión forman parte de la sección de la compañía Millán-Astray, del mismo regimiento Palma 47, bajo el único mando del joven teniente Adrián Fuentes.
Durante los cinco días de estancia en la Isla han realizado distintos recorridos por varios tramos del célebre camino semiperimetral en una misión de reconocimiento y vigilancia como bien natural preciado de esta Isla.
Las maniobras contemplan además una práctica de liderazgo para el oficial ante la sección, al ser el rango mayor en el ejercicio.
«Reconocemos el lugar y vigilamos que las zonas de los parques naturales estén en las mejores condiciones posibles», explica el teniente. El sol de justicia acompaña a los profesionales del Ejército que han venido a Menorca con el propósito, además, de hacer extensible su presencia en todo el Archipiélago con este tipo de salidas.
La sección ha realizado los recorridos entre Es Grau y Favàritx, Son Saura y Cala Mitjana, y este jueves, entre Cala Tirant y Binimel·là. «En todas ellas actualizamos la topografía del terreno y hacemos una vigilancia en aras a la protección del medio ambiente y de la belleza de este Camí de Cavalls», explica el teniente Fuentes.
Los ejercicios, además, se han completado con otro recorrido hasta la playa de Ets Alocs. Este viernes está previsto el desplazamiento hacia Ciutadella para tomar el barco que les llevará a Alcúdia y completar las maniobras con el regreso a la sede habitual del regimiento.
La sección se releva a lo largo del día, de manera que el mismo reconocimiento del terreno lo hagan todos los efectivos en la sesión matinal o en la vespertina. Los 17 soldados profesionales de la sección que han viajado a Menorca, de los 39 que la forman, habrán tomado contacto con la Isla por primera vez en su trayectoria ya que llevan todavía poco tiempo alistados en el Ejército español.