El presbítero Josep Seguí Mercadal (Maó, 5-11-1925) ha fallecido en Maó a los 95 años tras desarrollar una intensa trayectoria vital marcada por su doble compromiso con la vocación sacerdotal y, al mismo tiempo, por su actitud cívica vinculada a los movimientos culturales y sociopolíticos de crítica y oposición al franquismo en Menorca.
El 13 de junio de 1988 el pleno del Ayuntamiento de Maó, por unanimidad, acordó concederle la Medalla de Oro de la Ciudad como “público reconocimiento a su persona y su obra de compromiso con el mundo durante más de cincuenta años”. Con motivo de la entrega de esta distinción, Josep Seguí declaró al diario “MENORCA: “cuando me lo comunicaron, me dijeron que me habían escogido al ser una persona emblemática en la lucha por las libertades democráticas y por la solidaridad con el Tercer Mundo. En este sentido lo acepto de buen gusto y con mucha alegría, pensando en todas aquellas personas que trabajan por la libertad, la democracia y la solidaridad”.
En el discurso del acto de entrega de la Medalla de Oro de Maó dedicó sus palabras finales a destacar la devoción a la Mare de Déu de Gràcia, que le había sido inculcada por su madre, Emilia Mercadal Seguí. Y en agradecimiento a las dos, decidió depositar aquella medalla en el santuario de la patrona de Maó.
Desde la Diócesis de Menorca destacan que “el Sr. Seguí Mercadal desempeñó un papel importante, tanto en el posconcilio eclesial como en la transición política a la democracia, destacando su liderazgo activo en el movimiento Cristians pel Socialisme, con la organización de conferencias a cargo de destacados personajes como González Ruiz, Alfons Carles Comín y Enrique Miret Magdalena”.
Expresó la coherencia con sus convicciones y su pleno compromiso con el Evangelio al desprenderse de la finca familiar de Son Puig Gran a favor del Tercer Mundo a través de la ong Jesuitas Intermón.
Josep Seguí Mercadal fue el tercer hijo de una familia católica acomodada, con larga vinculación social en Maó. Sus padres, Pedro Seguí Oliver y Emilia Mercadal Seguí formaron a sus hijos en un ambiente de sólida educación cristiana.
Su vocación sacerdotal se desveló en la madurez, cuando ya ejercía como perito comercial. Resultaron decisivas su vinculación con los hermanos de La Salle y los cursillos de cristiandad. Cursó los estudios eclesiásticos en el Colegio Mayo de Santiago, en Salamanca, y recibió la ordenación sacerdotal el 10 de julio de 1955, a los 29 años. Después amplió sus estudios con la diplomatura en Sociología de la Religión por la Universidad de Lovaina (Bélgica) en 1969.
Ejerció su ministerio pastoral en la zona del levante de Menorca. Fue capellán de las Concepcionistas (1955), consiliario de los jóvenes de Acción Católica (1955), capellán del hospital Verge del Toro (1956), director espiritual del Instituto de Maó (1957), consiliario de los hombres de Acción Católica (1969), rector de la parroquia de Es Castell (1963), rector de la parroquia del Carme de Maó y responsable de su equipo sacerdotal (1979), profesor de Religión de la Escuela de Formación Profesional de Maó (1971), director de la Escuela de Formación Social Obrera de Menorca (1976) y rector de la parroquia de Santa Eulalia (1986).
Después de su jubilación continuó ayudando y colaborando en la tareas pastorales, en la medida de sus posibilidades, en las parroquias de El Carme y Santa Eulalia. Después se trasladó de su domicilio familiar a la Casa Sacerdotal de Maó, donde falleció este sábado 7 de agosto, a los 95 años, tras 66 años de vida sacerdotal en la Diócesis de Menorca.