El grupo de bomberos que quedan en la bolsa de interinos tras haber superado la oposición y el curso formativo ha emprendido acciones que derivarán en la presentación de una demanda contencioso administrativa contra el Consell por la negativa de la institución a contratarles y mantener la figura de los bomberos semiprofesionales en el Servicio Insular de Prevención y Extinción de Incendios. La demanda contemplará los posibles delitos de intrusismo y prevaricación ya que la institución insular está al corriente de la ilegalidad, indica el grupo.
Once de los integrantes de la bolsa han tomado la determinación de emprender acciones legales después de que las negociaciones establecidas con el equipo de gobierno no hayan fructificado. El grupo, que puso el caso en manos del despacho Arlis Abogados, ha contado con el respaldo de la formación sindical UGT, que recientemente recurrió al Defensor del Pueblo por este asunto.
El paso previo a la demanda lo dieron el pasado viernes presentando un requerimiento al Consell en el que recuerdan el compromiso público adquirido por la presidenta, Susana Mora, en la reunión de octubre para hallar una solución de la que serían informados en noviembre. Afirman que se ven obligados a emprender estas acciones para garantizar sus intereses y derechos.
Solicitan formalmente al Consell el cese y rectificación oportunos para eliminar y dejar de hacer uso de la figura de los bomberos semiprofesionales en detrimento de los que superaron el proceso selectivo. Estiman que ninguna norma ni acto jurídico ampara la contratación de los 34 semiprofesionales actuales y que el Consell mantiene una situación de facto como vía de hechos consumados, por lo que exigen el cese de esta situación ilegal. Apelan al intrusismo que puede estar facilitando la institución y a la falta de seguridad para los actuales profesionales obligados a trabajar con personal que no lo es. Recuerdan, así mismo, los informes del anterior jefe del servicio en el que pedía más profesionales para asegurar el servicio, y subrayan que el coste anual de los semiprofesionales es de 300.000 euros.
Al mismo tiempo los reclamantes solicitan que el Consell les indemnice por los perjuicios causados desde el pasado 1 de agosto, cuando ya estaban en disposición de incorporarse a la plantilla. Esto supondría una cuantía de 21.430 euros para cada uno de los 11 demandantes, tomando como base para su cálculo las nóminas de los que sí fueron contratados en esa fecha. De los 18 bomberos que completaron el curso, se han contratado 8 hasta ahora.