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Las transmisiones por herencia reciben un 95 % de bonificación en el impuesto de plusvalía

Es Migjorn se desmarca, no hará descuento alguno, y Ciutadella aplicará solo un 20 por ciento

Un chalé en venta en una urbanización, una de las operaciones inmobiliarias sujeta al impuesto de plusvalía. | Gemma Andreu

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No es lo mismo una transmisión en el ámbito familiar que un negocio jurídico «inter vivos», de ahí que las primeras, las referidas a las herencias, sean tenidas en cuenta por casi todos los ayuntamientos en el apartado de bonificaciones. Cinco    contemplan bonificaciones del 95 por ciento, mientras que Ciutadella, la rebaja al 20 por ciento y Es Migjorn no prevé ningún tipo de descuento.

Los impuestos relativos al derecho de sucesión son controvertidos desde el punto de vista político y social. Tienen tratamiento distinto por comunidades y también en las plusvalías.

Es Mercadal, que será líder en este impuesto cuando la ordenanza esté aprobada definitivamente, es también el más generoso en descuentos. Bonificará el 99 por ciento de las transmisiones derivadas de operaciones de fusiones o escisiones de empresas, aunque ello requerirá un acuerdo municipal. La operación requiere una permanencia de al menos cinco años, en caso contrario, ha de ser satisfecho el pago bonificado.

La reducción será del 95 por ciento en la cuota del impuesto cuando derive, por causa de muerte, de una transmisión de la propiedad de la vivienda habitual del fallecido en favor del cónyuge, ascendentes, descendientes y adoptados.

Este artículo es común en la ordenanza de plusvalía de Alaior, que amplía el descuento a la vivienda habitual de los herederos en el caso de que la propiedad fuera propiedad también del fallecido.

En Maó y Sant Lluís, con la misma redacción, se establece una bonificación del 95 por ciento para la vivienda familiar y para los bienes destinados a la empresa familiar. Para los inmuebles que sirvan de vivienda habitual de los herederos y cuya propiedad fuera del fallecido, el descuento baja al 50 por ciento.

La ordenanza de Es Castell contempla el 95 por ciento tanto para la vivienda habitual del fallecido que se transmite por herencia como los locales afectos a la actividad económica que ejercía y los bienes y derechos relacionados con la misma.

Ha de ser el interesado el que en todos los casos haga constar sus derechos a la bonificación.

Una rebaja por razones de herencia al 95 por ciento fue reclamada en Ciutadella por PP y Ciudadanos, durante el debate en el pleno. Al igual que se ha previsto en otros municipios, salvo Es Migjorn, se planteaba dejar en un pago simbólico la plusvalía de herencias que, por otra parte, ya están sujetas al impuesto de sucesiones. Finalmente, Ciutadella bonificará de manera general la quinta parte del impuesto.

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